¿Qué mejor forma de celebrar el Día de los Inocentes que con una nueva entrega de nuestra serie Errores de traducción? Si te gustaron la primera y la segunda entrega, la tercera te encantará igual. Sigue con nosotros y pasa un buen rato en este último viernes del año.
No sabemos de dónde sacarían la palabra «huelga» para traducir «Bienvenidos» en este restaurante. ¿Quizás no estaban muy contentos los empleados? Quién sabe…
No nos cansaremos de decir que las traducciones automáticas no son el futuro, sino el pasado. En este establecimiento siguen usando a Google para traducir sus «fitting rooms» por «el cuarto de cambiar». Bueno, razones no le faltan para llamarlo así, aunque no es lo más correcto cuanto tenemos una palabra en español para vestuario…
Aunque no tenemos el original, solo con ver la traducción ya podemos decir que aquí hay un problema. Literalmente, el cartel dice «Nuestra comida está garantizada para no causar embarazos«. Uhm… ¿Qué clase de comida los causa? ¿Qué tipo de comida es esta? ¡Dios mío, qué barbaridad están diciendo! Está claro que ellos no lo tenían muy claro…
Como pasa con el cartel anterior, aquí no tenemos el original, pero no hace falta ser un lince para darse cuenta de que esto, claramente, no está bien traducido. ¿Duro sombrero? ¿Quieren decir casco? ¡Vaya, pero qué gran imaginación tiene Google! Nos pone un sombrero duro y se queda tan tranquilo. Ay, lo que hacen las máquinas no lo hace nadie, ¿verdad?
¡No se puede ser más literal! Alguien debe de haber usado un traductor para traducirlo automáticamente desde otro idioma al inglés y, posteriormente, a español. Bueno, siempre nos quedarán los símbolos de la etiqueta, que ya nos informan, mucho mejor que la explicación posterior, de lo que se puede y no hacer con esta prenda. Y, para quien no lo entienda, por muy chulo que sea el hierro (?), dice que lavemos a mano, que no usemos lejía y que no lo planchemos. Aunque el hierro sea muy chulo, no lo planchéis…
Bueno, cuando uno no entienda de idiomas, es posible que comenta estos errores, aunque este es taaan grande… Queremos pensar que el local no se llama «Error del servidor de traducción«. ¿Os imagináis si realmente fuera así? Y lo peor de todo es que esto debe haber pasado por varias manos y nadie ha sabido que la traducción estaba mal. Lo que hay que ver…
Eso es todo por hoy, queridos lectores. Os esperamos en una próxima entrega de Errores de traducción. Y, no lo olvidéis, Google no es siempre la mejor de las opciones. 😉